Cuando pienses en cómo quieres sentirte en cada habitación de tu hogar, probablemente utilizarás las palabras “cálido y acogedor” para al menos un par de ellas.

Tu hogar es tu refugio del ajetreado mundo, por lo que solo tiene sentido querer darte un espacio para relajarte y sentirte cómodo.

Una parte clave para crear tu espacio cálido y acogedor ideal es elegir la paleta de colores adecuada y buscar en internet tips para pintar paredes. Hay colores acogedores que se adaptan a todos los estilos de decoración, desde el femenino al masculino, desde el moderno al tradicional, ¡y todo lo demás!

Echemos un vistazo más profundo a los tipos de colores que te ayudarán a crear el espacio más acogedor.

DALE A TU HOGAR UNA SENSACIÓN ACOGEDORA CON COLORES DE PINTURA CÁLIDOS

Los colores cálidos pueden ayudar a traer algo de luz a una habitación más oscura en tu hogar que no recibe mucha luz natural.

También pueden ayudar a que las habitaciones que dan al norte o al este se sientan menos frías y dar la ilusión de ser mucho más brillantes.

COLORES CÁLIDOS VS COLORES FRÍOS

Los colores cálidos se refieren a los colores que recuerdan al sol, al atardecer o al día.

Esto incluye cualquier color con matices de amarillo, rojo o naranja. En el lado opuesto, los colores fríos evocan una sensación de frescura porque nos recuerdan cosas como el agua o la hierba.

Incluye cualquier color con matices de azul, verde y morado (violeta). Elegir el tipo de color correcto es muy importante, ya que realmente puede afectar cómo te sientes en el espacio.

¿QUÉ COLORES HACEN QUE LA HABITACIÓN DE UN HOGAR SE VEA ACOGEDORA?

Los colores acogedores no se limitan solo a los tonos cálidos. Aún puedes obtener una sensación acogedora con ciertos colores fríos.

Si estás trabajando con tonos más fríos, elige versiones más oscuras para crear ese ambiente acogedor en tu hogar.

Piensa en azules oscuros como el azul marino o real, o en un verde oscuro como el musgo o el bosque.

¿QUÉ COLORES SON CÁLIDOS?

• El marrón es un gran color cálido que también tiene la ventaja de ser un tono neutro, lo que significa que es fácil de combinar con otros colores.

Los tonos van desde un café con leche muy suave hasta un espresso oscuro intenso o marrón chocolate.

• El amarillo es el color cálido por excelencia. ¡Es el color del sol, después de todo!

El tono de amarillo que elijas depende de la habitación en sí. En el caso de los dormitorios de tu hogar, querrás utilizar tonos más claros y pasteles (como el amarillo suave como la mantequilla), ya que los tonos brillantes pueden ser demasiado estimulantes para un espacio destinado a ser relajante.

Sin embargo, en una sala, comedor o cocina, estos tonos más brillantes de amarillo son perfectos: piensa en un amarillo dorado intenso o un ámbar cálido.

• El rojo puede parecer demasiado brillante al principio, pero hay una amplia gama de tonos que pueden funcionar a la perfección en cualquier espacio.

Si quieres quedarte con un rojo súper brillante, pruébalo como una pared decorativa o con muebles pintados de rojo.

Los rojos más oscuros como el burdeos o el granate son agradables para los colores de las paredes y pueden crear una apariencia sofisticada.

• El rosa puede ser una gran alternativa a los rojos superbrillantes. Para una sensación verdaderamente cálida y acogedora en tu hogar, opta por tonos más suaves.

Si se ilumina demasiado (como el chicle o el fucsia), tu espacio puede parecer demasiado abrumador y terminar sintiéndose demasiado frío.

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