Una nueva capa de pintura para interiores es una opción simple para mejorar el hogar y hacer maravillas en cualquier habitación.
Si bien es importante elegir el color de pintura adecuado para las paredes interiores y las molduras, el acabado de pintura interior que elijas también es fundamental para un trabajo de pintura duradero y visualmente atractivo.
Muchas personas piensan que todos los acabados de pintura para interiores están destinados a usarse en paredes, pero eso no podría estar más lejos de la realidad. El brillo de la pintura marca una gran diferencia en términos de durabilidad y estética.
Si no estás seguro de qué tipo de brillo usar para tu proyecto de pintura interior, un poco de masking tape azul y estos consejos pueden ayudarte a elegir los mejores acabados de pintura para cada habitación y superficie de tu hogar.
Tipos de acabados de pintura para interiores
Antes de decidir cuál es el mejor acabado de pintura para el interior de tu hogar, es importante comprender primero qué aporta cada tipo de acabado.
Los fabricantes usan muchos nombres para describir los acabados de pintura para interiores, desde mate hasta semibrillante, satinado, brillante y muy brillante.
Uno a uno, los diferentes tipos de pintura para interiores
La buena noticia es que, por lo general, puedes clasificar los brillos de pintura para interiores en solo cuatro categorías: mate, de bajo brillo, semibrillante y de alto brillo.
Pintura mate: los acabados de pintura mate o plana agregan riqueza al color de la pintura y pueden ocultar imperfecciones superficiales menores. Este tipo de pintura es fácil de retocar, pero su naturaleza porosa también absorbe las manchas, lo que significa que puede ser muy difícil de limpiar.
Cabe señalar que la pintura plana (que también usan los constructores) a menudo se cubre con cáscara de huevo.
Pinturas de bajo brillo: es una mezcla entre mate y satinado. Ni demasiado brillante ni demasiado opaco. Es uno de los brillos más populares.
El satín tiene aproximadamente el doble del brillo de la cáscara de huevo. Las pinturas de bajo brillo son menos porosas que las pinturas planas y se pueden limpiar fácilmente. Debido a que este acabado no es plano ni brillante, emite un brillo hermoso y discreto.
¡Dale brillo a tus paredes!
Pintura semibrillante: este acabado duradero de pintura para interiores refleja mucha luz y es fácil de limpiar, lo que lo hace ideal para resaltar la carpintería y pintar habitaciones propensas a la humedad.
Pintura de alto brillo: Las pinturas de alto brillo, brillo y extra brillo son las más duraderas de todos los acabados de pintura.
Gracias al acabado no poroso, son extremadamente fáciles de limpiar. Los brillos de alto brillo son ideales para pintar molduras, puertas y ventanas que se desgastan mucho.
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