En comparación con algunos de los muebles más modernos, los muebles más antiguos se fabricaron con una construcción de calidad y simplemente necesitan un poco de cariño.

Si tienes un mueble de la abuela al cual le guardas mucho cariño, quédate a leer esta información. Luego, prepara tus brochas y ve a tu tienda de pintura favorita a comprar pintura esmalte de calidad.

Considera el acabado que deseas lograr. Una vez que lo tengas en mente, es más fácil comenzar a pintar tus muebles.

Ya sea que se trate de una pieza anticuada de la que estás cansado o una joya vintage que compraste, un cambio de imagen de restauración seguramente te ahorrará dinero.

¡Quédate a leer estos tips!

¡Prepara la superficie!

Ya sea que estés sellando o aplicando tu pintura directamente, se recomienda siempre asegurarse de que la superficie del mueble que estás pintando esté completamente limpia, seca y libre de cualquier contaminante.

Lava el mueble a profundidad con una solución de agua caliente y detergente líquido. Enjuaga cualquier residuo de jabón con agua tibia limpia.

Por lo general, es una buena idea lijar la pintura o barniz existente para ayudar a que la siguiente capa se adhiera.

No minimices la importancia de un buen sellador

Hay algunas pinturas que no requieren sellador, así que siempre revisa las instrucciones en la etiqueta antes de comenzar.

Existen diferentes selladores diseñados específicamente para superficies de madera, plástico, metal o cerámica.

Este trabajo busca sellar la superficie, proporcionar una base uniforme para aplicar la pintura, todo lo cual mejora la durabilidad y la apariencia de tu acabado de pintura.

Las brochas de calidad cuestan un poco más, pero valen la pena

Existen dos tipos principales de brochas:

• Están los que tienen cerdas naturales.
• Luego, están aquellas que son elaboradas con materiales sintéticos.

Cuando uses pintura a base de aceite, el material natural le dará un mejor acabado. Sin embargo, cuando las cerdas naturales se usan con pintura a base de agua o látex, absorberán el agua y se volverán flácidas.

Tristemente, las brochas más baratas no contienen tanta pintura como las de mayor calidad, lo que significa que el trabajo de pintura llevará más tiempo.

Las brochas de mejor calidad también suelen tener un extremo cónico, lo que te dará más control, así que invierte desde el principio en brochas de calidad.

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