La pintura es probablemente la mejor manera de darle un empujón a tu casa. Aquí te damos estas recomendaciones para pintar.

Sin embargo, no puedes simplemente poner un poco de pintura en las paredes y dar por terminado. Un trabajo de pintura mal hecho se despegará. Tendrás que rehacerlo dentro de un año o dos.

La clave para un buen trabajo de pintura es preparar las paredes que vas a pintar.

Aleja todo de las paredes

Retira todos los muebles o al menos colócalos en el centro de la habitación y cúbrelos con una lona.

Quita las cortinas y las varillas que sujetan las cortinas. Retira los interruptores de luz y afloja las lámparas para que cuelguen lejos de las paredes o el techo.

Cubre los accesorios con bolsas o su equivalente.
Inspecciona las paredes en busca de daños. Busca algunos de los siguientes: clavos reventados, agujeros, grietas y pintura vieja descascarada.

Reparar el daño. Quita los clavos reventados y vuélvelos a clavar en la pared lo más lejos que puedas. Cubre la cabeza del clavo y rellena el agujero viejo con resanador.

Si necesitas pintar tus paredes y crear figuras geométricas, adquiere un masking tape azul y deja salir a ese genio que llevas dentro.

Más tips de remodelación

Usa un compuesto de reparación de paneles de yeso premezclado para rellenar los agujeros pequeños. Usa un kit de parches para rellenar los agujeros grandes, dejándolo parejo con la pared y rellenando el contorno del parche con un compuesto de masilla. Recorta las grietas, aspira el polvo y rellena el agujero con yeso.

Raspa las partículas sueltas y lija las áreas lisas que se hayan astillado.

Limpia las paredes con agua jabonosa y sella la madera desnuda.

Usa cinta adhesiva para cubrir las molduras, las áreas donde se juntarán dos colores, los zócalos y cualquier otro lugar donde no necesites pintar.

Retira la cinta poco a poco y usa tu pulgar para extender la cinta plana. Si estás haciendo algo elegante donde se juntarán 2 colores, usa un nivel de carpintero para delinear tu diseño ligeramente con lápiz antes de repasarlo con cinta adhesiva.

Una vez que hayas seguido todas estas instrucciones, encontrarás paredes lisas y limpias para pintar. La pintura se adherirá a estas paredes y se verá brillante en los años venideros.

Por supuesto, si necesitas ayuda con tu proyecto, contacta a un experto.

También te puede interesar: Establece tu personalidad en tu hogar